Dos lamentables decesos, y Laura, polémica
Historias que contar
A muchos nos ocurre que, como remanso, aspiramos a no vivir escenarios políticos cotidianos, hoy continuos, para ocuparnos de otros, no exentos de dramas, angustias, como los ocurridos en el cine, la música, el deporte y otras distracciones.
El lunes 23 del pasado agosto falleció a los 96 años, Trinidad Rosa Quintana, nacida en Buenos Aires, Argentina, el 16 de julio de 1925, y a quien se identificó en nuestro país como Rosita Quintana.
Inicialmente educada en el colegio de monjas María Auxiliadora, fue expulsada cuando constataron que en sus ratos libres, y otros no tanto, se dejaba llevar por su gusto de cantar tangos.
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Su natural disposición de intérprete propició que a los quince años ya fuera vocalista de la Orquesta de los Hermanos Caro.
A México llegó en 1947, invitada por un gran actor, ídolo popular, Jorge Negrete. A los dos años Rosita se nacionalizó mexicana.
Su fallecimiento se produjo tras haber estado internada en un hospital por un tumor de tiroides.
Su asistente personal Lupita Martínez, dijo que su respiración se fue espaciando, hasta morir.
La llamaron La Dama de América.
Apenas su primer filme en México, rodado en 1948, hubo la oportunidad de verlo nuevamente.
Se estima que participó en no menos de 59 cintas, entre estas La Santa del Barrio, Susana, El Mil Amores, Dueña y Señora, Calabacitas Tiernas, Escuela de Valientes, Amorcito Corazón y Tres Balas Perdidas.
De su vida personal poco se supo. Intentó escribir una autobiografía, pero no la continuó. “Mi vida privada es mía, no tengo razones para contar de los hombres que me amaron o a los que yo amé”, expresó.
Charlie Watts, un baterista excepcional
Y misma semana también enlutó a la música, y en especial al rock, al fallecer Charlie Watts, icónico baterista de Los Rolling Stones.
No soy experto en el tema. Mi amigo por décadas, y además compadre, Carlos Alberto Rodríguez y Arriaga, sabe de eso. Toca batería, conoce estilos y calidades.
Refirió que Watts impulsó a los Rolling, con los que estuvo 60 años, pero además, apuntó que hasta su deceso era todo un gentleman inglés, de forma de vestir impecable, sumando el ser modesto, inquebrantable, discreto e íntegro.
Murió a los 80 años. Se restablecía de un procedimiento médico que no se reveló.
En breve expresión, recientemente dijo: “Por un vez mi tiempo ha estado en contra. Estoy trabajando para estar completamente sano, pero tengo que aceptar, por consejo de los expertos, que esto llevará un tiempo”.
Se aludió que pese a su bonhomía, trato impecable, llegó a tener diferencias con otro grande del grupo, Mick Jagger.
Tras un comentario nada oportuno de Jagger, Watts replicó: “Nunca vuelvas a llamarme tu baterista…tú eres mi cantante”.
“Una gran pérdida”, resumió Rodríguez y Arriaga.
Laura Bozzo, en problemas legales
Su nombre completo es Laura Cecilia Bozzo Rotondo, nacida en Callao, Perú, el 19 de agosto de 1952. Ostenta también las nacionalidades italiana y mexicana.
Presentadora de televisión, ya ahora no tan popular como hace algunas décadas, enfrenta un problema legal que casi la ha llevado a las puertas de ingreso en el Penal de Santiaguito.
La han señalado responsable de vender una propiedad embargado por el SAT que era garantía de adeudo fiscal por algo más de 12 millones de pesos.
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Hasta donde ha trascendido, se le otorgó una suspensión provisional para que no fuera encarcelada, pero el juicio sigue abierto.
Sus emisiones, hasta donde se recuerda, llegaron a ser polémicas por la forma un tanto imperativa con que trataba a sus invitados.
Es posible que muy pronto se defina su situación, que ciertamente afecta su personalidad de figura pública.
