Finalmente dos diputados pierden el fuero

Historias que contar

Tras semanas en que la Cámara de Diputados retrasó acciones, dos diputados federales –ahora ex- Mauricio Alonso Toledo Gutiérrez (PT), ex delegado en Coyoacán, y Benjamín Saúl Huerta Corona –Morena- fueron desaforados con pruebas aportadas por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX). 

En el caso del primero, 381 legisladores votaron para retirarle la inmunidad, 24 en contra, así como 37 abstenciones, entre ellas 25 de priistas y cuatro de morenistas. El cargo principal fue enriquecimiento ilícito. 

Con el otro señalado, Benjamín Huerta, hubo más severidad, 447 a favor para desaforarlo, dos abstenciones y ninguno en contra de la sanción, tras imputaciones de  abuso sexual agravado y violación equiparada, también agravada. 

Inicialmente ninguno de los dos pudo ser detenido, pese a que la titular de la FGJCDMX, Ernestina Godoy, dijo que se contaría con el apoyo de autoridades federales y de otras entidades para localizarlos. 

Se supo que Toledo dejó el país el 26 de julio pasado y viajó a la República de Chile, de donde son originarios sus padres, Nelson Asdrúbal Toledo y Clementina Rosa Gutiérrez. 

En escueto comunicado, él citó que había ejercido su libertad de tránsito y antes solicitó permiso para separarse de sus funciones en la Cámara,  reiterando que era perseguido político. 

De los cargos en su contra sobresalen 577 millones de pesos en movimientos bancarios, por lo cual se investiga a familiares y probables prestanombres. También 223 millones en depósitos y 354 millones en retiros. 

Uno de los argumentos pareció vincularlo en acciones, al parecer poco claras, en recursos destinados de reconstrucción  del presupuesto de la CDMX en consecuencia del sismo de 2017. 

El siguiente paso de la FGJCDMX es la asistencia de la Fiscalía General de la República (FGR) para buscar la llamada ficha roja solicitando su extradición, lo que en principio obstaculizaría trámites, aunque Toledo renunció a la  nacionalidad chilena. 

Huerta, quien siempre se dijo inocente, desapareció tras la decisión de los congresistas. Lo buscaron en Puebla, de donde es originario, y después se citó, casi con carácter de declaración, que en los próximos días regresaría a la Ciudad de México para entregarse. 

Hubo por lo menos tres cateos infructuosos, uno en la CDMX, en la casa de su abogado y dos en territorio poblano. 

Finalmente, en la madrugada del jueves 19, fue detenido en una casa de la colonia Roma. Lo trasladaron para su certificación médica y posteriormente al Reclusorio Preventivo Oriente. 

En por lo menos dos emisiones de Milenio Noticias, sus padres y el joven, presumiblemente abusado, se presentaron en fragmentos informativos de la conductora Elisa Alanís. 

El afectado estuvo de espalda. Contó su lamentable episodio con el diputado. Sus padres simplemente demandaron justicia, visiblemente afectados. 

El supuesto será sujeto a proceso que conllevará en toda su crudeza largo tiempo, pero al final hay la confianza de que, como demandan el afectado y su familia, haya justicia en el mismo sentido de los perjuicios físicos y emocionales que provocó. 

Rosario Robles, dos años ya encarcelada 

Al frente de  Sedesol y Sedatu en el sexenio de Enrique Peña Nieto, el pasado viernes 13, Rosario Robles Berlanga cumplió dos años de estar detenida en el penal de Santa Martha Acatitla. 

La Fiscalía General de la república la acusó de ser responsable, por su encargo público, de la desviación más de cinco mil millones de pesos, en la llamada Estafa Maestra. 

Después de ser detenida, se dijo que sería testigo de oportunidad, dando cuenta de malos manejos de algunos destacados funcionarios del sexenio pasado. 

No lo hizo y declaró:  

“Fui yo la que me presenté desde la primera audiencia para esclarecer los hechos. Lo que no estoy dispuesta es a mentir (como lo han hecho otros) para alimentar un narrativa política que nada tiene que ver con la verdad y la justicia”. 

Su futuro es pues, incierto. 

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