La sonrisa de Ventura 

Agujeros Negros

Últimamente se le ve sonriente al secretario de Obras Públicas y Ordenamiento Territorial (Sopot), José Ventura Meneses Arrieta; hay quien dice es de nervios porque sigue emergiendo el iceberg de irregularidades en la dependencia a su cargo por y empieza a mencionarse que no sólo tiene consentidos también prestanombres y una demanda al gobierno del estado por 95 millones de pesos que aumentó al doble en obras recepcionadas y auditadas. 

El movimiento iniciado por un grupo de constructores a quienes no solo les adeudan obras desde el gobierno de Francisco Olvera Ruiz, sino que fueron castigados por Meneses Arrieta abrió la Caja de Pandora y conforme avanzan los días se conocen nuevos casos que en los siguientes días pueden generar no sólo más denuncias sino demandas que serán heredadas a la nueva administración estatal. 

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Las deudas son institucionales así que los empresarios de la construcción de no alcanzar un acuerdo los siguientes 35 días tendrán que acudir a los tribunales, lo que obligará a una investigación sobre a donde fueron a parar los recursos asignados a esas obras porque teóricamente estaban etiquetados y debieron servir para cubrir las obras públicas contratadas. 

Mientras se ejerce presión para que la mayor parte de los acreedores acepten el trato de firmar un finiquito a cambio del pago del 50 por ciento de lo que les deben, aún así se mantiene la deuda de a donde fueron a parar los recursos programados en lo que interviene también la Secretaría de Finanzas a quien no le fue muy bien al invertir 807 millones 128 mil 783 pesos en un fondo de inversión en el banco Accendo en proceso de quiebra y que no han podido recuperar. 

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Mientras tanto continúa el proceso entrega recepción cuyo resultado se complementará con auditorias que darán luz al nuevo gobierno y donde se aplicarán los compromisos de los dos gobernadores, por un lado que no habrá persecución, pero tampoco impunidad como lo expuso Julio Menchaca Salazar, por otro el de Omar Fayad Meneses de que si alguien se “comió” algo lo tendrá que pagar.  

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